Diário Clarín - sábado 06 diciembre 2008 - Argentina

Todo está podrido por la droga. Me quitaron la vida, mi hijo no fumaba, no tomaba, era el mejor alumno... Hay que parar con la droga, no hay que matar gente... Esto es joda ¿por qué dejan entrar tanto narcotraficante?" Así hablaba ayer Carlos González (el padre de "Rolo", el chico de 18 años secuestrado y asesinado a principios de semana), rodeado por una multitud que exigía el esclarecimiento del caso.



Cerca de las seis de la tarde, la esquina de Cabildo y Crisólogo Larralde comenzó a poblarse de gente. Un rato después, Larralde desbordaba y la calle se cortó al tránsito. Entonces comenzó la lenta caminata hasta la escuela donde Rodolfo "Rolo" González debía recibir ayer su título de perito mercantil.

Adelante iban los familiares. El padre, la madre y los dos hermanos encabezaban la manifestación. Los rodeaban amigos del chico y vecinos del barrio. A pocos metros había una bandera que decía: "Seguridad, basta de impunidad".

A paso lento, la columna --más de tres mil personas-- fue creciendo hasta abarcar cinco cuadras de extensión. A medida que iba pasando, en los balcones y ventanas los vecinos salían a aplaudir.

Pese al calor y el cansancio por el largo recorrido, la gente no dejó de exigir justicia. Los amigos del joven asesinado llevaban banderas con leyendas que decían: "Estamos con vos" y "Rolo está presente".

A diferencia de otras marchas en las que se reclama por hechos de inseguridad, la movilización de ayer estuvo cargada de tristeza. Muchos de los jóvenes que caminaban llevando fotos de Rolando lloraban. Habían fotocopiado imágenes del chico y se las repartían a todo el mundo. La imagen de la madre del joven resultaba desgarradora. Con anteojos negros y un ramo de flores en la mano, no dejó nunca de abrazar una enorme foto de su hijo.

La solidaridad de la gente se mostraba en cada esquina. Cuando la cabeza de la marcha llegó a la estación de servicio de Larralde y Balbín, los empleados dejaron un rato de atender y se sumaron con aplausos.

Al final del recorrido, el grueso de la marcha llegó a la puerta de la escuela, en Valdenegro y Larralde. Frente al edificio colgaron una bandera con la inscripción "Justicia por Rolo". Allí María Marta, la hermana del joven, agradeció a la gente que los hubieran acompañado en su dolor. Cerca de ella había otros familiares de víctimas de la inseguridad.

Los compañeros de quinto año del comercial suspendieron el acto de entrega de diplomas previsto para ayer. "Rolo" iba a ser el abanderado en el acto, donde recibiría su título de perito mercantil. "Era el mejor alumno, Rolito era como un angel", destacaron.

Rodolfo "Rolo" González fue secuestrado el domingo pasado a las 19.30, poco después de que saliera de su casa en Holmberg al 4200, del barrio de Saavedra.

Se cree que los secuestradores se subieron a su auto Volskwagen Gol blanco y llamaron a sus padres, a quienes les exigieron 50 mil dólares de rescate para liberarlo. Cerca de las 21.30, los secuestradores realizaron un nuevo llamado y los padres de González ofrecieron 6.000 pesos, la suma que habían logrado juntar.

A partir de entonces no los volvieron a llamar. El lunes a la mañana, un hombre alertó al 911 sobre la presencia de un cuerpo parcialmente quemado en un descampado cercano al CEAMSE, en la localidad de Bernal.

Según los forenses, el joven fue brutalmente golpeado antes de ser ejecutado por sus captores. Luego le dispararon en la nuca con una pistola calibre 45. Después rociaron el cuerpo con combustible y le prendieron fuego.

El auto de la víctima apareció el lunes al mediodía incinerado en la localidad de Valentín Alsina, en Lanús. Hasta el momento, por el crimen no hay detenidos.

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